El comportamiento y la relación con los programas de televisión que ven los alumnos de secundaria de la Institución Educativa Ventura Ccalamaqui de Barranca en el año 2017

Abstract

La televisión, como medio masivo, tiene características fundamentales, por medio de los cuales recibimos programas, que aportan y no aportan a nuestras vidas; existen programas culturales, pero gran cantidad de gente, sobre todo los adolescentes, no le dan importancia. Este medio, llega a la mayoría de nuestras familias, especialmente a los adolescentes, que se están en casa sin o casi sin supervisión adulta y no tienen una correcta preparación para los contenidos que disponen los canales, estos pueden modificar decisivamente las ideas u opiniones políticas de cada uno de ellos, mediando a corto o largo plazo, sobre sus puntos de vista y criterios sin que lo perciban, modificando su conducta, en ámbitos sociales, familiares, escolares y personales, especialmente en la formación de valores. Existen programas que gozan de la preferencia del público adolescente, en donde ellos se encuentran tan identificados con sus personajes que las imitan, como es el caso, del programa Al fondo hay sitio, donde se encuentra un personaje llamado Isabela, cuya frase es ahora bastante repetida por las adolescentes que suelen decir expresiones de Oh my (Oh mai), abreviación en ingles de decir Oh my got! (Oh mi dios), en situaciones de sorpresa. Otro caso, se vio en el programa Mil oficios, el personaje de Quique, le ponía nombre (malito) a su miembro viril y le conversaba, percibiendo que los adolescentes imitaban estas actitudes , gracia para la mayoría de las personas que no son concientes que la televisión influye bastante en ellos. También observamos que existen programas, películas culturales que aportan en la vida de los adolescentes, para que se interesen en aprender, por medio de imágenes audiovisuales, que puede ser más atractivo y entretenido, razón por la cual se puede dar un uso de este factor para su aprovechamiento con fines educativos. La preocupación generada por los padres y profesores de los hábitos televisivos, se considera importante al estudiar este problema, con la finalidad de buscar medios y formas didácticas de poner fronteras en la influencia negativa (palabras y gestos groseros) que los alumnos perciben y ser eliminada, pero de la misma manera aprovechar su preferencia para usarlo en beneficio de los propósitos educativos